Dreams rechaza acusaciones en licitación de casinos en Chile

El operador de casinos Dreams ha respondido de manera contundente y clara a las acusaciones de colusión presentadas por la Fiscalía Nacional Económica (FNE). Según la FNE, la empresa habría participado en prácticas anticompetitivas al lado de otras grandes cadenas de casinos, durante los procesos de licitación de permisos de operación realizados en 2020 y 2021. Sin embargo, Dreams niega categóricamente cualquier implicación en estos actos y asegura que ha cumplido con todas las normativas y principios de competencia establecidos por la legislación chilena.

Rechazo a las acusaciones y defensa ante el TDLC

En octubre, la FNE presentó una solicitud formal ante el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC), acusando a Dreams, Enjoy y Marina del Sol de haberse coludido para manipular el resultado de las licitaciones organizadas por la Superintendencia de Casinos de Juego (SCJ). Según la acusación, las tres empresas habrían acordado limitar la competencia entre ellas, optando únicamente por la renovación de las licencias que ya poseían en lugar de competir por nuevos permisos, lo cual afectaría gravemente la libre competencia.

A pesar de que el plazo para responder a la solicitud de la FNE expiró el 29 de noviembre de 2023, Dreams presentó excepciones dilatorias ante el tribunal con el fin de alargar el proceso. Estas excepciones fueron rechazadas por el TDLC el 16 de enero de 2024, lo que obligó a Dreams a presentar su defensa formal ante las autoridades competentes, reiterando su posición de inocencia en el caso.

Estrategia independiente y competitiva

Claudio Fischer, presidente de Dreams, y otros ejecutivos de la firma, como Jaime Wilhelm y Claudio Teada, rechazaron de manera rotunda las acusaciones de colusión. En un comunicado oficial, Fischer explicó que la empresa adoptó una “decisión independiente y racional” al optar exclusivamente por la renovación de las licencias existentes, sin coordinar su estrategia con otras compañías competidoras. Según la defensa, esta fue una medida basada en un análisis interno y en la necesidad de mantener la estabilidad económica y operativa de la empresa.

Fischer argumentó que las ofertas presentadas por Dreams fueron completamente competitivas y que, en ningún momento, se favoreció un acuerdo anticompetitivo. Añadió que las licitaciones estaban abiertas tanto para operadores actuales como para nuevos participantes, lo que desmentiría cualquier teoría de colusión o manipulación del proceso.

La falta de conocimiento sobre los acuerdos entre competidores

Uno de los puntos clave de la defensa de Dreams es que Fischer no tuvo participación ni conocimiento de los acuerdos entre las otras empresas competidoras que la FNE menciona como pruebas de la colusión. Según los documentos presentados, el presidente de Dreams no estaba al tanto de que se hubiera producido ninguna coordinación entre competidores y, por tanto, las decisiones tomadas por la empresa fueron completamente autónomas.

Además, Dreams explicó que la decisión de no competir por nuevos permisos no fue el resultado de un pacto con otras empresas, sino de un análisis interno realizado por el directorio, el cual determinó que esta estrategia era lo más conveniente desde el punto de vista económico. Esta decisión fue tomada en una reunión del directorio de la empresa en agosto de 2021, sin involucrar a ninguna otra empresa del sector en el proceso de deliberación.

Implicaciones para la industria de los casinos

Este caso sigue siendo parte de una investigación más amplia que la FNE está llevando a cabo sobre la industria de los casinos en Chile. Si bien las acusaciones de colusión están en proceso de revisión, el impacto potencial para el sector es significativo. Las implicaciones de este caso podrían alterar la manera en que se gestionan las licitaciones de permisos en el futuro, con cambios en las normativas que refuercen la transparencia y la competitividad dentro de la industria.

De confirmarse las acusaciones, se sentarían precedentes importantes para la regulación de los procesos de licitación en el país, lo que podría repercutir en la forma en que las autoridades gestionan la distribución de las licencias de operación para los casinos. Sin embargo, mientras la investigación continúe, Dreams mantiene su postura de que no ha incurrido en ninguna práctica ilegal y que las decisiones adoptadas fueron legítimas y dentro del marco de la ley.